Si cree lo que lee en los medios o en Internet, todos estamos expuestos al bisfenol A (BPA). Pero ¿importa? ¿Estamos expuestos a suficiente BPA como para que pueda resultar dañino?
Después de todo, casi todo puede ser dañino a un nivel suficientemente alto. A modo de ejemplo simple, piense en la aspirina. Si toma dos aspirinas, pueden calmarle un dolor de cabeza. Pero si se toma un frasco entero de aspirinas, esto puede provocarle un daño grave. Incluso la aspirina, la cual nos parece inofensiva, puede ser dañina a un nivel suficientemente alto.
Para el BPA, así como muchos otros químicos, la mejor manera de medir la exposición es con la ciencia del biomonitoreo. Sabemos que el BPA se convierte de manera eficiente en un metabolito biológicamente inactivo después de la exposición y luego se elimina rápidamente del cuerpo en la orina. Con el biomonitoreo, podemos medir la cantidad de BPA en la orina, en la forma de su metabolito, y esa información nos puede indicar si el nivel de exposición fue suficientemente alto como para ser dañino.
En los últimos años, se han realizado estudios de biomonitoreo sobre el BPA en todo el mundo. Recientemente, un grupo de científicos en España recopiló esos estudios y aplicó un riguroso conjunto de criterios para seleccionar los estudios de más alta calidad y confiabilidad. Luego, se compararon los resultados de biomonitoreo de los estudios de más alta calidad, realizados en más de 28.000 participantes, con los límites de exposición segura para el BPA establecidos por organismos gubernamentales a nivel mundial.
Recientemente, investigadores españoles publicaron los resultados de este análisis en bibliografía científica, y su conclusión sobre los niveles de exposición es muy tranquilizadora. En líneas generales, los investigadores llegaron a la conclusión de que “el rango esperado de concentraciones de BPA estimadas en humanos sugiere que los riesgos potenciales para la salud son improbables”.
Destacando la fortaleza de su estudio, los autores también indicaron que el análisis “proporciona las estimaciones de resumen más precisas de exposición a BPA en poblaciones adultas generales disponible hasta ahora”.
Se llegó a la conclusión general al comparar los resultados de biomonitoreo con los límites seguros de BPA establecidos por organismos gubernamentales. En todos los casos, los resultados de biomonitoreo están entre 100 y 1000 veces por debajo de los valores límite seguros, lo que indica que los riesgos para la salud a partir de la exposición al BPA son improbables.
Esto es particularmente relevante para el nivel de biomonitoreo seguro establecido por las autoridades alemanas. Como indican los autores, los niveles de biomonitoreo más bajos “no presentarían efectos adversos sobre la salud y, en consecuencia, no requerirían acciones preventivas”.
Esta conclusión sobre la seguridad del BPA coincide con los puntos de vista de las autoridades gubernamentales de todo el mundo. Por ejemplo, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. responde la pregunta “¿Es seguro el BPA?” con una clara respuesta: “Sí”.
Volviendo al inicio, es muy probable que esté expuesto al BPA. Sin embargo, casi con certeza, la cantidad a la que está expuesto está muy por debajo de un nivel que podría causar efectos sobre la salud. Si le preocupa su salud, como debería ser, la exposición al BPA es algo que no tiene que preocuparle.