Actualizado en agosto 2023
Una buena manera de determinar si estamos expuestos a un nivel seguro o inseguro de un químico es a través de la ciencia conocida como biomonitoreo. Después de todo, si no estamos expuestos a un determinado riesgo, este no puede causarnos daño. A la inversa, estar expuestos a un nivel elevado de casi cualquier cosa puede ser perjudicial. El biomonitoreo puede decirnos dónde estamos en ese espectro.
El lugar para detectar el BPA en un estudio de biomonitoreo es la orina. Esto se debe a que, después de la exposición, el BPA se convierte de manera eficiente en un metabolito biológicamente inactivo, que se elimina muy rápidamente del cuerpo en la orina. Medir este metabolito en la orina se considera la mejor manera de evaluar la exposición a BPA, especialmente si la exposición puede estar en niveles potencialmente perjudiciales.
Nada de esto es un secreto, y se han realizado numerosos estudios de biomonitoreo sobre el BPA en todo el mundo. Hace varios años, un grupo de investigadores reunió los estudios disponibles y comparó los resultados con los niveles de ingesta segura establecidos por los organismos gubernamentales.
Informaron que: “[e]n total, obtuvimos más de 140 publicaciones revisadas por expertos que contenían más de 85.000 datos [puntos] respecto de las concentraciones de BPA en la orina, derivados de 30 países”. Hallaron que la exposición real a BPA es cientos a miles de veces inferior a los límites de ingesta segura.
Ahora podemos agregar a esa lista un nuevo estudio de biomonitoreo en adolescentes, realizado por un grupo de investigadores belgas. Los investigadores obtuvieron muestras de orina de 423 adolescentes, hombres y mujeres (de 14 a 15 años de edad) de las cinco provincias flamencas (norte de Bélgica), por lo que la población del estudio es representativa de la población flamenca.
Se analizaron las muestras para detectar la concentración de BPA utilizando un procedimiento validado con anterioridad por los mismos investigadores. Luego, se comparó el nivel de exposición a BPA con el límite de ingesta segura de BPA establecido por los organismos gubernamentales europeos.
Los resultados son muy tranquilizadores. Los autores arribaron a la siguiente conclusión: “incluso en situaciones de exposición elevada … no se prevén preocupaciones de salud para esta población”. El nivel de exposición a BPA común fue de aproximadamente 180 veces menos que el límite de ingesta segura establecido en Europa.
Aún más tranquilizador es cómo se comparan estos resultados con los límites de ingesta segura en otros países. Por ejemplo, los niveles de exposición a BPA comunes entre los adolescentes flamencos son de aproximadamente una a dos mil veces inferiores a los límites de ingesta segura en los EE. UU. y Canadá. En los EE. UU., la Administración de Alimentos y Medicamentos lo expresa claramente en la sección de preguntas y respuestas sobre la seguridad del BPA en su sitio web: ¿Es seguro el BPA? Sí.
Según los resultados de este nuevo estudio, podemos estar seguros de que los adolescentes flamencos no están en riesgo por exposición a BPA. Y, en función de los resultados de numerosos estudios de biomonitoreo realizados en todo el mundo, la exposición a BPA no es una preocupación para la salud en ninguno de los lugares del mundo en los que se la ha estudiado.