¿Sabía que el BPA se utiliza principalmente para elaborar plástico de policarbonato, un plástico resistente algunas veces usado en recipientes duros y transparentes para almacenar alimentos? También se utiliza para elaborar resinas epoxi.

Las resinas epoxi han sido muy utilizadas durante más de 30 años para revestir latas para alimentos y bebidas, para proteger la calidad y las propiedades nutritivas de los alimentos y para prolongar su vida útil.

El BPA que se ingiere a través de la alimentación diaria habitual está 1​000 veces por debajo del nivel de ingesta seguro establecido por científicos del gobierno. Un consumidor debería ingerir cientos de libras de alimentos y bebidas en contacto con plástico de policarbonato o resinas epoxi cada día para superar el límite seguro.

El BPA ha sido sometido a numerosas pruebas y sabemos, de la mano de científicos de la FDA, que las cantidades mínimas a las que estamos expuestos a través de los materiales que permiten conservar de forma segura nuestros alimentos, también son seguros para nosotros.